Esta especie es endémica de hábitats de bosque húmedo montano y bosque nublado, situados en altitudes elevadas. Es especialmente común en zonas de sotobosque densamente vegetado, donde se alimenta principalmente de insectos, arañas y otros invertebrados pequeños que encuentra entre la vegetación y el suelo.
El churrín del norte es conocido por su comportamiento tímido y cauteloso, lo que lo hace difícil de observar. Suele moverse sigilosamente entre la vegetación, buscando alimento y vocalizando en tonos bajos y silbantes. Su canto varía según la ubicación geográfica y puede ser utilizado para identificar las diferentes subespecies.