El hábitat preferido de esta especie incluye bosques montañosos y áreas de matorrales en altitudes elevadas, generalmente entre los 1500 y 3000 metros sobre el nivel del mar. Suele habitar zonas de vegetación densa y arbustos que le proporcionan refugio y fuentes de alimento.
El Conirrostro gigante es una especie que resalta tanto por su belleza visual como por su comportamiento aéreo único. Su presencia en los ecosistemas montañosos agrega un toque de color y vitalidad, y su forma de vuelo distintiva es un recordatorio de la asombrosa diversidad de adaptaciones que las aves han desarrollado para sobrevivir y prosperar en diferentes entornos.